Hoy quiero compartir contigo un breve devocional basado en Proverbios 4:7, que nos invita a buscar la sabiduría. La sabiduría es una cualidad invaluable que nos guía en la toma de decisiones correctas y nos acerca a Dios en nuestro caminar diario.

En Proverbios 4:7, leemos: «La sabiduría es lo principal; adquiere sabiduría; y sobre todas tus posesiones adquiere inteligencia.» Estas palabras del rey Salomón nos recuerdan la importancia de hacer de la sabiduría nuestra prioridad y de buscarla diligentemente.

La sabiduría no se adquiere de la noche a la mañana, ni es un conocimiento meramente intelectual. Es un proceso continuo de aprendizaje y crecimiento espiritual. Entonces, ¿cómo podemos buscar la sabiduría?

En primer lugar, debemos tener un corazón humilde y reconocer que no lo sabemos todo. Reconocer nuestra necesidad de sabiduría nos abre a recibir la enseñanza de Dios y de aquellos que tienen más experiencia. Debemos estar dispuestos a aprender de los demás y ser receptivos a la dirección que Dios nos da a través de Su Palabra y del consejo sabio de aquellos que nos rodean.

En segundo lugar, buscar la sabiduría implica dedicar tiempo a la lectura y meditación de la Palabra de Dios. La Biblia es la fuente suprema de sabiduría divina. A través de ella, Dios nos revela Su carácter, Sus principios y Su voluntad para nuestras vidas. Al estudiar la Palabra y permitir que nos transforme, adquirimos la sabiduría que necesitamos para enfrentar los desafíos diarios.

En tercer lugar, la oración desempeña un papel fundamental en nuestra búsqueda de la sabiduría. Cuando nos acercamos a Dios en oración, podemos pedirle que nos guíe y nos dé discernimiento en nuestras decisiones. La sabiduría divina va más allá de nuestra capacidad humana y Dios está dispuesto a otorgarla generosamente a aquellos que la buscan con sinceridad.

Finalmente, buscar la sabiduría también implica ponerla en práctica. No basta con tener conocimiento; debemos aplicar lo que aprendemos en nuestras vidas diarias. La sabiduría se evidencia en nuestras acciones y en cómo vivimos nuestras vidas en obediencia a los principios de Dios.

Te animo a hacer de la búsqueda de la sabiduría una prioridad en tu vida. No solo te beneficiarás a ti mismo/a, sino que también serás una bendición para aquellos que te rodean. Recuerda que la sabiduría es un regalo valioso de Dios y está a tu disposición si la buscas con diligencia.

Que el Señor te guíe en tu búsqueda de la sabiduría y te conceda discernimiento en todas las áreas de tu vida.